Una tarde un chico caminaba a casa de la escuela y
una mujer vieja se aproximó a él:
“¿Quieres una pierna? ¿Quieres una pieeerna?”
El chico intentó ignorarla pero ella no se fue:
“¿Quieres una pieerna? ¿Quieres una pieeerna?
Ella le preguntaba, una y otra vez.
“¡No quiero una pierna!” rechazó a la mujer
duramente.
Un horrible grito sonó en la oscura calle.
La gente que se apresuró hacia el lugar se llevaron
el trauma de su vida.
En la calle yacía un chico que tenía su pierna
arrancada.
No hay escape del Legmonger.
Si dices que
no al monstruo, tú perderás tu pierna como el chico pero di sí y ella te pondrá
la tercera pierna, tanto como si quieres como si no.
Sólo hay un respuesta que conseguiría que quedaras a
salvo de la situación:
Decirle, “No quiero tus servicios, pero sugiero que
vayas y preguntes a (el nombre de alguien). Ella haría como tú dices e iría a
esa otra persona, pero asegúrate de decir el nombre de alguien que no te guste…(he
he he)
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